SOCIEDAD
El financista Enrique Blaksley trajo al país a figuras como Roger Federer y Usain Bolt. Hoy, enfrenta denuncias de la AFIP y supuestas víctimas por lavado, estafas y defraudaciones que llegan a millones de pesos. Los contratos “milagrosos” y los cheques sin fondo.
El esquema de negocios es el siguiente: toma depósitos de diferentes montos y promete jugosos intereses a muy corto plazo. Al principio, cumplía. Así generaba un lazo con cada uno de sus depositantes, a quienes retenía para otros negocios futuros. Luego, dejó de pagar. "El sistema que usaba era el de friends and family. Como el amigo invirtió, esa persona trae a otra. Esto funcionó bien durante un tiempo", explicó Víctor Varone, uno de los abogados de decenas de perjudicados.
Cientos de personas confiaron en él. Ahora todos están con problemas para cobrar. "Puse 18 mil dólares por un amigo de mi viejo. Lo único que hacía era firmar un contrato. Nunca nos dijeron para qué usaban la plata", relató Franco Marcuzzi, otro denunciante. "Uno buscaba gente dentro del entorno de uno para convencer. En mi caso, no fueron más de 10. Llegué a ver gente pidiendo turnos para depositar la plata. Es un mentiroso de los peores", sintetizó Mariano Maydana, uno de los que era vendedores, pero que ahora es damnificado.
Quién es Enrique Blaksley?
Que dice el abogado de Hope Funds
Confiar o no
"Construimos riquezas para las personas y para protegérselas". Esta frase era una de las que siempre repetía Enrique Blaksley Señorans en cientos de charlas de liderazgos que daba. El financista no cumplió con su palabra como dueño de la compañía, y hoy va a Tribunales por varios motivos.
Pero Comodoro Py no es su único problema. En el fuero laboral, seis de sus ex vendedores estrella representados por el abogado Gonzalo Espinosa Paz -especialista en derecho del trabajo y una figura frecuente en los casos más resonantes en la materia– denunciaron a Blaksley por haberes impagos y trabajo en negro. El daño colectivo, según estima el abogado, es de casi 400 millones de pesos.
El doctor Espinosa Paz apunta: "Mis clientes recibían sus haberes principalmente en negro, cerca de un 70%. El resto se facturaba. Comenzaron a cobrar en parte en diciembre pasado. En mayo de este año, Hope Funds dejó de pagar totalmente". Hoy, el conflicto se encuentra tras una serie de intimaciones bajo el Servicio de Conciliación Obligatoria (SECLO) del Ministerio de Trabajo. Los abogados de Hope Funds, afirma Espinosa, no se presentaron a ninguna de las citaciones.
El financista Enrique Blaksley trajo al país a figuras como Roger Federer y Usain Bolt. Hoy, enfrenta denuncias de la AFIP y supuestas víctimas por lavado, estafas y defraudaciones que llegan a millones de pesos. Los contratos “milagrosos” y los cheques sin fondo.
Personas que todavía esperan el cobro del dinero que invirtieron en esa compañía con la promesa de jugosos intereses dieron sus testimonios al sitio TN. Cuatro de los damnificados y uno de los abogados que está llevando la causa contra Blaksley contaron del presunto sistema de estafas montado desde Hope Funds: todos coinciden en que la confianza era la base del engaño.
"Puse 150 mil dólares. Al principio funcionó. Cobré y se los volví a dar, con otro contrato en el cual cobraba intereses como una renta. Por dos años ocurría esto. Fue en diciembre de 2015. A partir de septiembre de 2016 ya no cobré", contó Susana Majewski. La mujer dijo que todo se trataba de "la confianza" y que Hope Funds tenía el objetivo de conseguir depósitos de "gente con plata".
Cientos de personas confiaron en él. Ahora todos están con problemas para cobrar. "Puse 18 mil dólares por un amigo de mi viejo. Lo único que hacía era firmar un contrato. Nunca nos dijeron para qué usaban la plata", relató Franco Marcuzzi, otro denunciante. "Uno buscaba gente dentro del entorno de uno para convencer. En mi caso, no fueron más de 10. Llegué a ver gente pidiendo turnos para depositar la plata. Es un mentiroso de los peores", sintetizó Mariano Maydana, uno de los que era vendedores, pero que ahora es damnificado.
El caso de Blaksley volvió a cobrar notoriedad en las últimas semanas luego de que apareció un aviso fúnebre en el diario Clarín del 19 de noviembre. Allí les deseaba un falso saludo a la familia del financista uno de los abogados que patrocina a decenas de estafados.
Con 51 años, Blaksley se crió en San Isidro. Empezó con el negocio de los Seguros, pero rápidamente, gracias a su carisma, se vinculó a otros emprendimientos reconocidos. Con el correr de los años se hizo amigo de mucha gente de dinero que le permitió crecer dentro del mundo de las finanzas. Así, la empresa Hope Funds incrementó su caudal a través de las décadas.
Con 51 años, Blaksley se crió en San Isidro. Empezó con el negocio de los Seguros, pero rápidamente, gracias a su carisma, se vinculó a otros emprendimientos reconocidos. Con el correr de los años se hizo amigo de mucha gente de dinero que le permitió crecer dentro del mundo de las finanzas. Así, la empresa Hope Funds incrementó su caudal a través de las décadas.
En los últimos 8 años, esta compañía usó un notable recurso de marketing para promocionar y gestar la venida al país de reconocidos deportistas. De esta manera, Blaksley trajó a la ciudad a Usain Bolt, a las tenistas Williams, organizó partidos a beneficio con Lionel Messi, y hasta llegó a dar una charla sobre "liderazgo" junto a Manu Ginóbili.
Todo se empezó a derrumbar luego de que estallara el caso de los Panamá Papers. Blaksley está acusado de estafa por parte de cientos de personas que no cobraron. Pero también el ojo está puesto en él por las decenas de firmas off-shore que creó en Panamá, y en otros países, en las que depositó millones de dólares de sus propios ahorristas, que aún no recibieron el dinero entregado. En los próximos días podrían impedirle la salida del país.
María Eugenia Duffard fue hasta las oficinas que Hope Funds tiene en Sarmiento 776 de la Capital Federal. Blaksley no la recibió, pero su abogado su versión de los hechos. Afirmó que la compañía "está pagando" pero que "a lo mejor no está cumpliendo con los plazos requeridos". También volcó el peso de la historia a los abogados de los damnificados.
"Hubo una campaña de prensa en contra nuestra generado por los dos estudios jurídicos que llevaron todo a un extremo que nos hizo complicada la satisfacción de los deudores. Se están tratando de solucionar los problemas, pero la empresa no está en quiebra. No es que no se les paga. Se ha demorado el pago, que es distinto. Una cosa es ser estafador y otra cosa es tener un problema de liquidez transitoria", explicitó Ramiro Rúa.
Sobre el final, la periodista le preguntó al abogado si alguna vez invirtió en Hope Funds. "No, nunca lo hice", respondió. "¿Inveritiría?", repreguntó. "Sí, claro que sí", cerró.
"Hubo una campaña de prensa en contra nuestra generado por los dos estudios jurídicos que llevaron todo a un extremo que nos hizo complicada la satisfacción de los deudores. Se están tratando de solucionar los problemas, pero la empresa no está en quiebra. No es que no se les paga. Se ha demorado el pago, que es distinto. Una cosa es ser estafador y otra cosa es tener un problema de liquidez transitoria", explicitó Ramiro Rúa.
Sobre el final, la periodista le preguntó al abogado si alguna vez invirtió en Hope Funds. "No, nunca lo hice", respondió. "¿Inveritiría?", repreguntó. "Sí, claro que sí", cerró.
Confiar o no
"Construimos riquezas para las personas y para protegérselas". Esta frase era una de las que siempre repetía Enrique Blaksley Señorans en cientos de charlas de liderazgos que daba. El financista no cumplió con su palabra como dueño de la compañía, y hoy va a Tribunales por varios motivos.
Fue denunciado junto a decena de asociados y colaboradores como su hermano Tomás junto a más de veinte sociedades por cerca de 200 ahorristas representados por los abogados querellantes Víctor Varone y Gonzalo Romero Victorica. Lo acusan de estafarlos, de haber puesto dinero sin recibir un solo centavo, en una causa a cargo del Juzgado Federal Nº1 de María Romilda Servini con la Fiscalía Nº12 del doctor Patricio Evers.
Pero Comodoro Py no es su único problema. En el fuero laboral, seis de sus ex vendedores estrella representados por el abogado Gonzalo Espinosa Paz -especialista en derecho del trabajo y una figura frecuente en los casos más resonantes en la materia– denunciaron a Blaksley por haberes impagos y trabajo en negro. El daño colectivo, según estima el abogado, es de casi 400 millones de pesos.
El doctor Espinosa Paz apunta: "Mis clientes recibían sus haberes principalmente en negro, cerca de un 70%. El resto se facturaba. Comenzaron a cobrar en parte en diciembre pasado. En mayo de este año, Hope Funds dejó de pagar totalmente". Hoy, el conflicto se encuentra tras una serie de intimaciones bajo el Servicio de Conciliación Obligatoria (SECLO) del Ministerio de Trabajo. Los abogados de Hope Funds, afirma Espinosa, no se presentaron a ninguna de las citaciones.