El
científico británico Brian Cox ha sugerido que una hipotética civilización
inteligente fuera de nuestro planeta vería comprometida su existencia por su
alto grado de desarrollo científico.
Es poco
probable que los humanos se encuentren con los extraterrestres, ya que
cualquier civilización alienígena está destinada a desaparecer poco después de
desarrollarse, estima el físico y presentador británico Brian Cox citado por el
diario 'Daily Mail'. Así lo afirman el propio Cox y Jeff Forshaw en el nuevo
libro 'Universal: Un Guía para el Espacio'.
Los avances
científicos que lograría una hipotética civilización alienígena harían
imposible que las instituciones políticas fueran capaces de dirigirla, lo que
daría lugar a un modelo autodestructivo, según el científico británico. Una
civilización inteligente que empleara gases de efecto invernadero o armas nucleares
estaría en riesgo existencial.
Cox se ha
referido al físico italiano Enrico Fermi, quien en la década de 1950 formuló
una conocida paradoja: la posibilidad de que haya vida inteligente fuera de
nuestro planeta capaz de colonizar la galaxia y la falta de pruebas para
demostrarlo.
A juicio del
coautor de 'Universal: Un Guía para el Espacio', una explicación que resolvería
la paradoja de Fermi es que no podemos tener pruebas de la existencia de vida
extraterrestre porque esta pudo haber acabado con ella misma: "No es
posible dirigir un mundo que posee el poder de destruirse". Para que la
humanidad no corra la misma suerte que los alienígenas, el experto ha sugerido
que se encuentren "soluciones colaborativas globales".
"Tal
vez la ciencia y de la ingeniería inevitablemente superen el desarrollo de la
pericia política, lo que conducirá al desastre", ha subrayado el físico
británico. En el libro, Cox y Forshaw sugieren que los políticos actuales deben
empezar a pensar más como científicos y basar sus opiniones en datos y pruebas
en vez de presentar supuestas siempre certezas a la sociedad