El periódico libanés Al-Akhbar, afiliado a Hezbolá, informó el sábado por la mañana que Egipto está intentando unir a los países árabes en torno a la idea de una fuerza árabe conjunta, inspirada en la OTAN, capaz de actuar para defender a cualquier país árabe bajo ataque.
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Foto: CC BY-SA 4.0 |
La medida egipcia se produce antes de la cumbre de emergencia árabe-islámica que comenzará el domingo en Doha. Esto se produce en el contexto del ataque israelí en Catar y de los informes que indican que las relaciones diplomáticas entre Israel y Egipto se encuentran en su nivel más bajo desde el comienzo de la guerra, con la coordinación de seguridad entre ambas partes suspendida «hasta nuevo aviso».
Un alto funcionario egipcio familiarizado con los detalles afirmó que El Cairo «tiene grandes esperanzas de obtener apoyo para una vía de implementación práctica» para la propuesta, planteada por primera vez hace nueve años. Según el funcionario, la iniciativa aún enfrenta obstáculos prácticos, en particular el momento de la intervención de la fuerza y su mecanismo operativo.
Según el informe, Egipto está trabajando con sus ramas militares para formular propuestas para el mecanismo operativo de la fuerza, lo que permitiría su despliegue cuando fuera necesario. La fuerza estaría compuesta de forma proporcional al tamaño de la población y la capacidad militar de los diferentes estados árabes, manteniendo al mismo tiempo el equilibrio regional y político en su estructura. Egipto busca comandar la fuerza, colocando a Arabia Saudita o a uno de los estados del Golfo en el puesto de segundo al mando.
El informe también indicó que Egipto propone enviar 20.000 soldados de su ejército a la fuerza árabe conjunta y espera beneficiarse de esta medida en términos de desarrollo militar y de equipar a su ejército con el armamento más avanzado.
El periódico también señaló que los diplomáticos involucrados en la configuración de esta fuerza coinciden en la convicción de que su creación no debe interpretarse como una declaración de guerra a Israel, ya que algunos estados árabes podrían usarla como pretexto para iniciar una confrontación militar directa con Israel.
Ali Larijani, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, respondió al informe libanés instando a los países islámicos a establecer una sala de operaciones conjunta contra «la locura de la entidad sionista».
Por otro lado, el líder de la oposición israelí, Yair Lapid, criticó la propuesta de Egipto de formar una fuerza árabe conjunta en respuesta a los ataques israelíes, declarando:
«Este es un duro golpe a los acuerdos de paz, que llega justo después de un golpe significativo a los Acuerdos de Abraham, y después de que la abrumadora mayoría de los países que alguna vez fueron aliados de Israel votaran a favor del establecimiento de un Estado palestino».
Lapid culpó además al gobierno israelí:
«Han destruido nuestra reputación internacional. Una combinación letal de irresponsabilidad, incompetencia y arrogancia nos está destrozando a nivel mundial. Debemos reemplazarlos antes de que sea demasiado tarde».
UPI